La Planificación del estudio
La planificación del estudio juega un papel fundamental a la hora de obtener un buen rendimiento y éxito en los estudios y al mismo tiempo, adquirir un hábito de estudio.
La RAE define “ planificación” como “ plan general, metódicamente organizado y frecuentemente de gran amplitud, para obtener un objetivo determinado, tal como el desarrollo armónico de una ciudad, el desarrollo económico, la investigación científica, el funcionamiento de una industria, etc.”.
Por este motivo es esencial llevar a cabo una buena planificación con el fin de alcanzar unos resultados óptimos y evitar en gran medida agobios de última hora.
Para realizar una buena planificación, hay que empezar por establecer una serie de objetivos o metas a alcanzar teniendo en cuenta por ejemplo si hay algún examen próximo, algún trabajo que entregar,etc.
Además es muy importante distribuir el tiempo que se va a dedicar a cada actividad en función de su complejidad, prioridad (por eso es imprescindible realizar un planning con las fechas de los exámenes / trabajos que son más próximos en el tiempo y cuáles no) y también va a influir otro tipo de actividades, por ejemplo extraescolares, y que van a ocupar una parte importante de nuestro tiempo.
Para que esta planificación sea eficaz, es inevitable ser constante y al mismo tiempo implica un esfuerzo y disciplina personal ( hábito de estudio) para así, conseguir los objetivos previamente establecidos. Si se estudia de una manera regular, con constancia, esfuerzo y con la ayuda de un horario, los resultados serán mejores.
Cada alumno aprende de una manera, ritmo diferente y cada uno tendrá sus propias limitaciones y dificultades a la hora de enfrentarse al estudio. Como consecuencia de esto, la planificación también será distinta y tendrá que adaptarse a las necesidades de cada estudiante.
En general, la planificación ha de ser personal, realista y flexible.
Y por último, os dejamos algunos consejillos prácticos:
- Comienza por las asignaturas que te resulten más fáciles: de esta manera aumenta la motivación. Por este motivo lo ideal sería: tarea / estudio asignatura ” más fácil”; continuar con la que implica una mayor complejidad o dificultad; y terminar la sesión de estudio con alguna tarea dinámica y amena para eludir y sobrellevar el cansancio.
- La planificación es mejor si es semanal para que se adapte a las necesidades de cada momento.
- Realiza pausas (no muy largas) entre una actividad / asignatura y otras. Lo más recomendable es realizar descansos entre tareas de unos 10 o 15 minutos. Aprovecha ese tiempo para merendar, despejarte un rato.
- Intenta estudiar y llevar al día lo que se haya visto en clase por la mañana.
- ¡Recuerda! Hacer tareas, no es estudiar. Por este motivo, en la planificación debe distinguirse entre estudio y realización de tareas. Lo ideal es que se dedique en torno a unos 45 minutos por tramo, para que así la concentración sea máxima.
- Dedica tiempo a repasar.
- Cumple el horario en la medida de lo posible, sin constancia no lo conseguirás.
- Los agobios y prisas de última hora no sirven de nada.
- Si vas a estudiar, aleja de tu lugar de estudio todo tipo de distracciones que puedas tener (whatsapp, internet…).
Aquí os mostramos un ejemplo de planificación semanal:
Esperamos que durante este segundo trimestre que acabamos de iniciar llevéis a cabo de forma semanal la planificación y de esta manera, junto con la constancia y el esfuerzo, obtendréis unos resultados óptimos este trimestre.